En 100 años cambian muchas cosas, entre ellas cambia la forma de beber, pero no ha cambiado la bebida preferida de todos. El café ha conectado a generaciones en una costumbre por la que han pasado grandes celebridades. Federico García Lorca, Melchor Almagro, Fernando de los Ríos , Manuel de Falla o Ángel Ganivet son algunos de los nombres que de los granadinos más ilustres. El primero de ellos, Federico, se reunía con más intelectuales y artistas en la Plaza del Campillo, donde existió uno de los cafés más antiguos de Granada.
Dónde se tomaba café en Granada
Uno de los cafés más famosos a principios del siglo XX fue el Café Imperial. En él, un cartel informaba a sus clientes que el local estaba abierto a la salida de los teatros. Y es que es la zona escogida para la apertura del local no podía ser mejor. En plena Acera del Casino, cerca de la Fuente de las Batallas, reunía a burgueses, limpiabotas, obreros y literatos en el mismo lugar.
De las cafeterías que triunfaron a principios del siglo XX pocas siguen en pie. Podemos contar dos que abrieron en los años 20. Uno es el famoso Café Fútbol de Plaza de la Mariana y otro, el Gran Café Bib-Rambla.
Los cafés cantantes
La forma de tomar café ha cambiado mucho. Para nosotros es una bebida con la que asociamos la pausa. Sin embargo, para nuestros padres, abuelos y bisabuelos era una bebida que acompañaba a grandes espectáculos.
Hoy en Granada muchos se preguntan por qué el Suizo, tan popular entre los jóvenes, lleva ese nombre. Esto se debe al Café Suizo, donde se podía disfrutar de conciertos de violín y guitarra. Sonidos quizás, parecidos a los que inspiraron a Joaquín Rodrigo a crear su gran obra, el Concierto de Aranjuez.
También existían cafés, como en toda Andalucía, que ofrecían espectáculos de flamenco. Se trata de los cafés cantantes, lugares que surgieron en el sur de España a mediados del siglo XIX y que fueron responsables de que el flamenco fuera hoy lo que es. Se dice que en alguna época llegaron a estar abiertos en Madrid 50 de este tipo de locales simultáneamente, algo que dice mucho del gran éxito que alcanzaron este tipo de cafés.
Hoy el café sigue siendo igualmente importante. Igual que el flamenco ha evolucionado, también lo ha hecho el café. Hace 100 años el café se tomaba en compañía y hoy cada cual tiene su momento para tomarlo y su forma de hacerlo. La accesibilidad de una taza de café es mucho mayor hoy, y eso es algo digno de celebrar.
Fuentes: Granada Digital, Efemérides granadinas
Deja una respuesta